Con andar pausado
la mirada fija,
el cabello alborotado
el oído atento,
ensimismado en su pensamiento
distraído del mundo,
atento a su destino
se dirige
el amor vagabundo,
esperando encontrar
corazón dispuesto
a cobijar su pesar
herido en lo profundo.
Dispuesto a entregar
la vida entera
no hay razón
no hay espera
la angustia y el tormento
silenciosamente callada
su vida desespera.
Una esperanza se presenta
en el camino de la reyerta
agua cristalina llega
a corazón sediento
seco por la amargura.
Bebe mi amor eterno
dice la compañera silenciosa
nunca estuviste solo
yo estuve detrás de ella.
HCC/2016
hernan1951
lima miraflores
belépett:
ya quisieran algunas manos acariciar como lo hacen tus palabras....!